Si las fuerzas reaccionarias de nuestro país no hubieran atacado, saboteado y creado estados de inseguridad, empleando todos los medios a su alcance y, finalmente, dando un golpe de estado que nos llevó a una guerra civil que duró tres años, hoy, 14 de abril de 2011, estaríamos celebrando el 80 aniversario de la República Española.
Un golpe de estado contra un gobierno legal, elegido democráticamente por el pueblo; esto es bueno repetirlo para que nadie crea que fue un enfrentamiento entre dos bandos. Sólo había un bando, el de los golpistas, y el gobierno legítimo de la República. Lo que vino después de la derrota de la República no fue la paz, fue la victoria de los golpistas que recuperaron todos sus privilegios, volviendo a sumir al pueblo en la miseria y el oscurantismo.
Los españoles de aquellos años vivieron una experiencia tan terrible que jamás podrán olvidar; adultos y niños, todos los vencidos, los hijos de éstos y la familia fueron maltratados, humillados, encarcelados y fusilados, peladas las mujeres, aterrorizados cuando algún esbirro al que llamaban autoridad se les acercaba; aparte del hambre, la miseria, el analfabetismo, a las mujeres además se les asignó el papel de la resignación, todo con la complicidad de la iglesia que también había tomado parte en la sublevación. 80 años en la vida de las personas es mucho tiempo, más de una generación que apenas conoció la República, y a la inmensa mayoría que nació después se les escamoteo la verdad, unas veces mintiéndole y otras omitiéndola, pensaron que lo que no se dice no existe, pero la historia, tarde o temprano, sale a la luz y pone de manifiesto cómo sucedieron los hechos.
80 años dan mucho de sí. La sociedad se ha recuperado; nos costó 40 años conquistar la libertad, muchos quedaron en el camino sin verla, pero muchos españoles que no conocieron la segunda república tienen muchas esperanzas de conocer la tercera, no importa lo que tarde, pero España al fin será Republicana.
Será una República que emane directamente de las urnas, será moderna, acorde con los tiempos en los que se viva, se asentará en gobiernos democráticos donde todos tengamos los mismos derechos reales, derecho al trabajo, a la vivienda, a la cultura, etc.; en la que cuenten todos los votos y que todos los españoles podamos sentirnos representados en el congreso.
Y, desde luego, será una República en la que los derechos humanos estarán siempre vigentes, comprometida con la paz, el medio ambiente, por los derechos de todos los ciudadanos pero también por sus deberes.
En este 14 de Abril tan simbólico para nosotras, las mujeres de la asociación Marianne, pensamos que muchas mujeres quedaron en el olvido, no pudiendo desarrollar sus capacidades por falta de oportunidades, quedaron marginadas, relegadas al cuidado de los hijos y del hogar. Nuestro compromiso es trabajar para sacar del olvido tantas historias de mujeres heroicas que en los momentos tan difíciles por los que pasó nuestro pueblo supieron resistir sin renunciar a sus ideales.
Ana Claro
Asociación de Mujeres Marianne
